Artículos de Metapolítica
Por Eduardo Hernando Nieto
Continuando con el debate iniciado por el Prof. Gamio entorno al concepto de dignidad que según su peculiar lectura de los antiguos estaría muy presente en la literatura clásica, tengo que aclarar nuevamente algunas de las imprecisiones que él señala en su texto y que distorsionan mucho la naturaleza de la discusión.
Pero, antes que nada quiero destacar algo que me parece sustantivo y que constituyen el eje de su texto. Señala como siempre que mi lectura es indirecta y que me baso entonces no en la razón sino en la AUTORIDAD de los académicos que utilizo, perfecto, sin embargo, me pregunto, no hace lo mismo el cuando se trata de Aristóteles o de las Tragedias Griegas que el mismo relata. Es evidente, que no es posible excluir a la autoridad en cualquier debate intelectual y por eso la tensión entre la revelación y la razón es preocupación permanente entre aquellos que pretenden comprender la realidad. Me imagino que el filósofo Gamio estará al tanto de ello.
Son tantas las acusaciones del colega que no se por donde empezar, primero que a la carencia de rigurosidad en mis argumentos por usar fuentes “indirectas” hay que sumarle también la ausencia de formalidad lógica en mi discurso (porque incluyo en mi texto una serie de contradicciones formales y sustantivas) [1] , que escribo desde la ideología fascista, que no entiendo lo que es el estoicismo, que predico un elitismo sin fundamento etc., etc.
Es cierto que yo no se hablar ni leer griego pero creo que eso no me descalifica totalmente para poder discutir sobre el tema. Es verdad que si se tratara de escribir una tesis doctoral sobre Aristóteles tendría que saber griego pero no estamos en eso aquí y afortunadamente hay “scholars” muy versados en esa lengua y pueden encontrarse buenas traducciones en inglés o francés de los “antiguos”. Por otro lado me imagino que el erudito Gamio debe ser muy diestro en la lengua de Sócrates y por lo tanto sus interpretaciones tienen que ser tomadas como fuentes de conocimiento, algo pretensioso el amigo Gamio… que no comparte las interpretaciones y traducciones de Strauss o de sus discípulos muy bien tratados dicho sea de paso por la academia como en el caso de Allan Bloom o de Seth Benardete. Me parece que aquí sí, las limitaciones de Gamio en el manejo del inglés le impiden tener acceso a esta literatura que es muy interesante.
Respecto a mi calificativo de “gnóstico” para el discurso de Gamio, simplemente empleo un término acuñado por Eric Vöegelin y no encuentro como él dice una contradicción en mi afirmación. Los gnósticos ya tienen una verdad absoluta y por eso decía que no pueden ser filósofos en el auténtico sentido porque ya no buscan la verdad (que es el caso de Gamio), lo que ocurre es que la realidad dista mucho de esa verdad que ellos sostienen y por eso ante esa coyuntura es que los Gnósticos aparecen siempre como revolucionarios, pretendiendo el cambio, entonces si la gente por ejemplo exige la pena de muerte para los terroristas entonces ellos que no admiten tal posibilidad lucharán (porque la verdad dice que la vida es sagrada) con todas sus fuerzas para erradicar la pena de muerte . Creo a su vez que la COSMOVISIÓN de Gamio se encuentra – como el mismo parece deslizar – en el famoso informe de la Comisión de la Verdad , (fíjense nomás el nombrecito) el mismo que refleja la esencia de la verdad que él profesa pero que como decía hace un instante no calza necesariamente con la realidad de las cosas. Por ello, no extraña ese juego de la imaginación que parece emplear Gamio y que lo vincula directamente con la modernidad romántica que es además una forma de armonizar (en la imaginación por supuesto) a los contrarios verbigracia la comunidad con el individuo, la libertad con la igualdad, el pluralismo con la unidad etc., etc., y que es como bien dice Gamio una forma de pensamiento moderno, totalmente de acuerdo y por eso es que tanto Strauss como Schmitt tuvieron críticas importantes respecto a este discurso tan ecuménico e irreal.
Sobre el tema de la justicia, simplemente estaba apelando a una forma distinta de interpretación que no tiene nada que ver con la dignidad humana que es una deformación de la modernidad desde mi punto de vista alentada por el estoicismo y el cristianismo. En esta interpretación – al margen si Gamio está en lo correcto al negar la distinción entre lo subjetivo y lo objetivo que propone Villey – lo justo se entiende como lo correcto, esto es, una cosa, una parte que se debe, por supuesto que no es siempre fácil llegar a este resultado (en ningún momento sostuve eso) para eso sirve pues la prudencia y tampoco se descarta la deliberación, justamente al ser lo justo parte de un discurso práctico tiene que ser sometido a la razón pública pero este sometimiento a la razón pública puede dar lugar a muchas respuestas, por ejemplo, ¿cómo se expresaría esa razón pública en un escenario de emergencia o de guerra en el cual la comunidad puede estar sometida a una grave amenaza? , ¿la razón publica debe descartar cualquier método o acción?, Si lee con atención Gamio mi más reciente trabajo DERECHO Y EMERGENICA : HACIA UNA TEORIA DEL DERECHO DEL ENEMIGO (Lima, Departamento de Derecho de la PUCP, 2007), observará como no sólo los “fascistas” consideran que es necesario abandonar la lectura maximalista de los derechos humanos sino destacados “Professors” de importantes universidades norteamericanas (por ejemplo Richard Posner y Bruce Ackerman)
En relación a la afirmación del filósofo Gamio sobre mi reducida lectura de lo que es propiamente la tarea de la filosofía política, esto es, no la búsqueda del mejor régimen político, sino la definición de lo que debe ser una buena vida, o mejor dicho, como se debería vivir , quiero decir que él está equivocado, por un lado no parece entender el significado de la palabra régimen político (forma que adopta la ciudad) y la imposibilidad de separar éste de lo que es justamente el concepto de buena vida, no tiene sentido preguntarse por la forma como debe vivir un hombre si es que este no vive en una ciudad y que además ésta posea un régimen político que pueda posibilitar precisamente el aspirar a una buena vida, en un régimen tiránico no hay espacio para pensar en la buena vida. Por eso como señala Strauss y como podría agregar un académico francés en cierto modo próximo a su pensamiento como Pierre Manent , la filosofía política es el HOMBRE Y LA CIUDAD, pero es evidente que sin ciudad no existiría el hombre en su sentido real.
Quiero concluir con lo siguiente, creo que Gamio ha desviado el foco de la discusión real, por un lado si la discusión se centra en afirmar la presencia del concepto de “dignidad” entre los antiguos, no se si con el puñado de citas que hace – siguiendo su traducción – alcanza para concluir con la veracidad de su aserto, es decir, que ya los antiguos manejaban la idea de la dignidad, si esto es así – cosa que no creo- entonces ¿Cuál sería la diferencia esencial entre los antiguos y los modernos? (diferencias que Gamio admite en varios casos) . Por otro lado, ¿cómo queda el concepto de esclavo en el mundo antiguo?. ¿qué académicos siguen a Gamio en su extraña tesis? , por último una pregunta directa para él, ¿qué tanto ha penetrado el pensamiento romántico en sus ideas?
Finalmente, creo que sería más interesante discutir respecto a la justificación de los derechos humanos en un estado de excepción y del porque tanto liberales (de izquierda y derecha) admiten la existencia de este coto vedado de los derechos humanos en donde ninguna voluntad puede intervenir y nadie puede alterar aun en un estado de emergencia. Pregunto ¿Esta intransigencia no sería más bien una cuestión de fe antes que de razón?. Creo que los modernos (GAMIO) a diferencia de los antiguos solamente se mueven entre los extremos, del extremo de la razón (los ilustrados criticados por su mentor Rorty o el ahora muy alabado Isaias Berlin) han pasado ahora al extremo de la fe, fe en los derechos humanos, fe en el poder de la deliberación pública, y muchas otras más. La sabiduría de los antiguos como muy bien lo representa Strauss siempre se movió incluyendo a ambos, allí radica pienso yo su superioridad.
[1] Curioso pues hace varios años que soy profesor de Razonamiento Jurídico en la Academia de la Magistratura en donde trabajo no solo razonamientos formales sino también materiales (la amada retórica de Gamio por ejemplo)
8 comentarios:
Estimado Eduardo:
Interesante y pintoresco, pero ¿De dónde sacas que no conozco el inglés, si hace tiempo que trabajo directamente a los autores del debate contemporáneo, incluido Bloom? Ese simplemente es un dato falso, no entiendo la intención, la verdad. Esta clase de mlentendido - que inducen a los lectores al error - son los que distorsionan el debate.
Saludos,
Gonzalo.
Ver mi respuesta en: http://gonzalogamio.blogspot.com/
Saludos,
Gonzalo.
Eduardo:
hice un comentario sobre tu polémica con Gonzalo. Saludos,
http://martintanaka.blogspot.com/2007/12/httpjosetalavera.html
Profesor Hernando:
Hay un punto que no comprendo muy bien. Gonzalo Gamio señala que en la antigüedad se pretendía educar al pueblo en el respeto y la valoración de la vida humana en sí misma, como fin y no como medio. Pone muchos ejemplos, entre ellos el más contundente me parece el de "Filoctetes" de Sófocles. Odiseo quiere robar el arco de Filoctetes para con él salvar a los griegos, sabiendo que Filoctetes moriría sin su arco. Neoptolomeo (hijo de Aquiles), en cambio, se rehúsa a utilizar a Filoctetes como un medio, y busca convencerlo pacíficamente. Evidentemente es un tema de fines y de medios. Usted señala que no, que ese tema no se ha tocado nunca en la Grecia clásica porque Leo Strauss lo dice. Pero, ¿es un hecho que la tragedia Filoctetes existe, no? Entonces, no entiendo cuál es su punto. Me parece que el profesor Gamio al citar las tragedias no le está exigiendo que le crea a él, sino que lo verifique Ud. mismo, es decir, que las lea. Usted, sin embargo, permanece en su negativa basándose en Leo Strauss, pero me imagino que Leo Strauss tendrá sus fuentes para esa afirmación. ¿Por qué no las comparte? Yo creo que si algún día el señor Strauss dijera, por ejemplo, que en “La república” Glaucón se toma un chilcano de pisco, no bastaría su récord académico para creerle sino que sería necesario revisar los textos para verificar. Filoctetes, por ejemplo, es una tragedia relativamente pequeña, y se puede bajar en español de Internet. Evidentemente no será una buena traducción pero el tema es tan obvio que incluso en una mala se podría comprender fácilmente. Es como un cuento, nada más.
Saludos,
Manuel Barrantes
gracias por el dato de internet lo tomare en cuenta ;)
El punto es: Porque de una interpretacion de una tragedia pequeña griega podemos concluir que los griegos eran unos humanistas "avant la lettre" esta inferencia exagerada solo cabe en la mente de alguien que quiere llevar a los clasicos a las aguas de su molino ideologico (caviar)
saludos
eduardo
El punto que señala Manuel era justamente lo que yo quería sostener en nuestro debate.
No se trata sólo de "Filóctetes": "Antígona", "Suplicantes", "Troyanas", etc....en mi primer post incorporo numerosos ejemplos literarios y filosóficos que sustentan la tesis griega del "otro como fin". Sólo hay que verificarlo directamente. El supuesto "caviarismo" no tiene nada que ver.
Ya habrá tiempo para seguir conversando sobre el tema.
Un saludo, Eduardo.
Gonzalo.
Hola Eduardo:
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http://nuestrasrazones.blogspot.com/
Yo particularmente estoy en desacuerdo con lo que sostienen Scalia y Derhowitz, pero igual resulta interesante analizar los casos que platean. Además, es interesante que personas que son liberales en ciertos aspectos, puedan defender este tipo de propuestas.
César
Pues claro que me interesa, muchas gracias Cesar
eduardo
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