Artículos de Metapolítica
Ante la grosera distorsión sobre el pensamiento nacional revolucionario y la metapolítica, desarrollada con mala intención e ignorancia por Gustavo Faverón Patriau y sus “epígonos”, voy a tratar de exponer de manera sucinta lo que es este pensamiento, pero no para buscar convencer a alguien de sus bondades sino para evitar que mucha gente no informada caiga en las generalizaciones y banalizaciones que efectuó Faverón en un sin número de mensajes en su blog personal, todos además dirigidos a desprestigiarme.
Podría decir en principio que se trata de un término acuñado por el Profesor Armin Mohler, [1] - secretario personal del escritor Ernst Jünger durante varios años - para referirse a una importante manifestación del pensamiento alemán del periodo de entre guerras y que incluía una serie de personalidades de distintos ámbitos del saber, desde la economía hasta la literatura o desde la sociología a la teología. Autores como Jünger, Sombart, Spengler, Niekisch, Moeller van der Bruck, inclusive hasta el mismo poeta místico Stefan George, - maestro espiritual nada de los hermanos Stauffenberg [2]- también fue incluido dentro de esta grupo.
Así pues, bajo esta categoría se incorporó un conjunto de personalidades que en muchas ocasiones terminaron perseguidos por el Nacional –Socialismo (como el caso de Niekisch siendo finalmente protegido por los hermanos Jünger) o fusilados como en el caso de Claus von Stauffenberg. Decir entonces que la Revolución Conservadora era Fascista o Nazi es simplemente afirmar que nada se sabe sobre este tema.
Pero, ¿Qué tenían en común estos autores clasificados por aquellos que jamás los han leído como fascistas o Nazis a secas? En primer lugar, ellos fueron sin duda un producto del pensamiento romántico alemán del siglo XIX, discurso altamente crítico del racionalismo francés y sus tesis del universalismo, frente a ello, reivindicaban la diferencia y la identidad colectiva (que dirá Gonzalo Gamio al observar aquí la génesis de su querido comunitarismo Tayloriano). Así mismo, se sentían muy cercanos a lo que llamaríamos una vida con propósitos como la vida heroica frente a una vida vaciada de contenido que se contentaba con producir confort y entretenimiento (vida burguesa).
Sorprenderá a muchos saber por ejemplo que los queridos e inofensivos “Boy Scouts” de Baden Powel tuvieron su origen en los movimientos de los “Wandervogels” , asociaciones de jóvenes que aspiraban a una vida más natural y en convivencia directa con la naturaleza que surgieron dentro de la Revolución Conservadora.
En pocas palabras, el movimiento aparecía como una respuesta a la “Civilización” burguesa, proponiendo en su reemplazo la “Kultur” , una reivindicación de la vida natural contra la vida artificial. Un contacto directo con las fuentes primigenias del ser (la espiritualidad) frente al materialismo ateo.
Se trata finalmente de un tema complejo pero que no puede ser dejado a Wikipedia o algún folletín mal intencionado. Precisamente, el trabajo académico se debe abocar a aclarar las cosas y mostrarlas en su real dimensión. Nada ganamos poniendo etiquetas gratuitamente sin haber leído por ejemplo una línea de un trabajo emblemático para la “Konservative Revolution” como ·El Trabajador de Ernst Jünger. (Continuará)
Podría decir en principio que se trata de un término acuñado por el Profesor Armin Mohler, [1] - secretario personal del escritor Ernst Jünger durante varios años - para referirse a una importante manifestación del pensamiento alemán del periodo de entre guerras y que incluía una serie de personalidades de distintos ámbitos del saber, desde la economía hasta la literatura o desde la sociología a la teología. Autores como Jünger, Sombart, Spengler, Niekisch, Moeller van der Bruck, inclusive hasta el mismo poeta místico Stefan George, - maestro espiritual nada de los hermanos Stauffenberg [2]- también fue incluido dentro de esta grupo.
Así pues, bajo esta categoría se incorporó un conjunto de personalidades que en muchas ocasiones terminaron perseguidos por el Nacional –Socialismo (como el caso de Niekisch siendo finalmente protegido por los hermanos Jünger) o fusilados como en el caso de Claus von Stauffenberg. Decir entonces que la Revolución Conservadora era Fascista o Nazi es simplemente afirmar que nada se sabe sobre este tema.
Pero, ¿Qué tenían en común estos autores clasificados por aquellos que jamás los han leído como fascistas o Nazis a secas? En primer lugar, ellos fueron sin duda un producto del pensamiento romántico alemán del siglo XIX, discurso altamente crítico del racionalismo francés y sus tesis del universalismo, frente a ello, reivindicaban la diferencia y la identidad colectiva (que dirá Gonzalo Gamio al observar aquí la génesis de su querido comunitarismo Tayloriano). Así mismo, se sentían muy cercanos a lo que llamaríamos una vida con propósitos como la vida heroica frente a una vida vaciada de contenido que se contentaba con producir confort y entretenimiento (vida burguesa).
Sorprenderá a muchos saber por ejemplo que los queridos e inofensivos “Boy Scouts” de Baden Powel tuvieron su origen en los movimientos de los “Wandervogels” , asociaciones de jóvenes que aspiraban a una vida más natural y en convivencia directa con la naturaleza que surgieron dentro de la Revolución Conservadora.
En pocas palabras, el movimiento aparecía como una respuesta a la “Civilización” burguesa, proponiendo en su reemplazo la “Kultur” , una reivindicación de la vida natural contra la vida artificial. Un contacto directo con las fuentes primigenias del ser (la espiritualidad) frente al materialismo ateo.
Se trata finalmente de un tema complejo pero que no puede ser dejado a Wikipedia o algún folletín mal intencionado. Precisamente, el trabajo académico se debe abocar a aclarar las cosas y mostrarlas en su real dimensión. Nada ganamos poniendo etiquetas gratuitamente sin haber leído por ejemplo una línea de un trabajo emblemático para la “Konservative Revolution” como ·El Trabajador de Ernst Jünger. (Continuará)
[1] Die Konservative Revolution in Deutschland 1918 – 1932 . Ein Handbuch. Con este trabajo Mohler obtuvo el grado de Doctor en la Universidad de Basilea, asesorado por los profesores Herman Schmalenbach y Karl Jaspers. Fue también director de la Fundación Friedrich Siemmens y Premio Konrad Adenauer (1967) , fue además Profesor de Ciencia Política en la Universidad de Innsbruck.
[2] Claus precisamente fue el que colocó la bomba destinada a eliminar a Hitler.
28 comentarios:
Mucho pedir, querido Eduardo. No hay Faverón sin Wikipedia.
Interesante artículo, pero pienso que algunos no lo van a entender. Su inteligencia está nublada por sus ideologías y distorsionada por sus complejos.
GB,
No lo publiqué antes porque estaba en clase. Está en mi blog, y me parece que en lo sustancial guarda las formas.
Saludos,
Gonzalo.
Bien corta la aclaración, pero vale para las abundantes mentalidades políticamente correctas, que ve fascistas por todos lados. De todas maneras, el cuadro de la Revolución Conservadora que intenta desarrollar Mohler es bastante amplio y cruza muchas veces las categorías usuales de derechas e izquierdas. De hecho, tampoco existe una suerte de separación tajante entre la revolución conservadora y algunos exponentes del nazismo. Al parecer, beberían del mismo ethos común, la oposición a las ideas de la revolución francesa. Recuérdese que un exponente inicial de uno de los 5 grupos que componen la revolución conservador -los nacional bolcheviques- fue el Doctor Goebbels.
Saludos
Rodrigo N.
PD:He seguido vuestro blog con mucha atención, que califico como genial. También he leído sus artículos en Ciudad de los Césares.
Hernando,
Tu aclaración no aclara mucho. Cuando leí el título del post, dije, vaya!, vamos a ver que une a estos autores realmente. No me parece que hayas hecho un buen trabajo mostrando que no están unidos por los elementos que menciona Faveron: totalitarismo, tradicionalismo, misticismo, etc. ¿Por que no haces un check list de todos estos autores y respondes a dos o tres de las preguntas formuladas por Faveron como lafiliación con el nazismo o el facismo, etc.? Prueba pues que Faveron está equivocado. A lo mejor con un check list te entienden.
Saludos,
A los Anonimos:
gracias por sus mensajes, en principio debo reconocer que el texto de Mohler efectivamente da un listado muy amplio de autores que terminaron perseguidos por los nacionalsocialistas o como perseguidores (NS). Si vemos que se trata de un libro de dos tomos (yo lei la traduccion al frances de Pardes) obviamente no se puede hacer referencias a todas estas cosas. Creo que dos textos utiles para entender el transfondo de esto seria el de Herf sobre el "Modernimoreaccionario" (aunque discrepo con muchas de sus afirmaciones) y el trabajo de Goodrick - Clarke sobre el contexto esoterico de la Alemania de entreguerras.
Por otro lado lo que buscaba solamente era señalar que no se puede simplificar y decir a la ligera que todos son "fascistas", ni siquiera hoy se que es lo que entiende esta gente (faveron y cia) por ese termino, pues si lo entendemos por Antiliberal entonces Burke fue un fascista antes de tiempo, o si lo entendemos por Antimoderno, entonces el buen Guenon (a quien tambien he leido en varios de sus textos) seria otro fascitas. Yo no puedo discutir con ellos porque como decia sus conocimiento sobre la materia es elemental asi que no tendria nada que debatir.
Por ultimo no tengo tiempo para estar ocupandome tanto de este problema porque tengo familia, tengo que trabajar y finalmente estoy acabando una ponencia sobre el concepto de derecho natural en Leo Strauss
saludos
eduardo
Bien Eduardo, me parece que has plantado unas estacas que delimitan básicamente el tema. Ha sido una 'desasnada' en sí bemol y una 'chiquita' con cafecito incluído. Lógicamente es un uña solamente la que has mostrado del pavo, porque el desarrollo es bien amplio y solamente acotar que el fructífero movimiento Romántico alemán ya ponía los gérmenes de la multiculturalidad y/o pluriculturalidad, era el nacionalismo que respetaba costumbres, literatura, héroes e historia que genera identidad frente a un discurso que tenía pretensiones totalizadoras, como que luego se acentuó dicha dictadura totalizadora del consumo y del mercado. Coda: "Opiné sobre el tema del regreso a la tradición de la siguiente forma: Sobre ese encendido debate sobre la Tradición y el liberalismo, me ha quedado tintineando el término, 'regresar a la Tradición', y bueno, Gonzalo desarrolla un discurso eurocentrista básicamente en los valores y en los anclajes. Y la pregunta es: En el caso peruano, en el caso nuestro, del cholo, del zambo, del indígena, del criollo y del 'criollazo' a que tipo de 'Regreso a la Tradición' nos estamos refiriendo. ¿Cuál tradición peruana? Si vemos la historia nacional, que recuerde no hubo en el Perú tradición alguna que salvar, salvo 'Las Tradiciones Peruanas' del Bibliotecario Mendigo, y los ricos dulces de las abuelas, pero después? Si no tuvimos aquí ni monarquía, ni gobierno artistocrático FORMAL y LEGAL, solamente tuvimos largamente un régimen colonial embrutecedor y luego una República vestida con harapos, hambrienta y pícara hasta por demás. Me gustaría saber sobre ese RETORNO A LA TRADICIÓN pero en el caso cholo, es decir en el caso peruano."
El discurso de la ilustración provocó también dogmatismo.¿Acaso eso no fue lo que ocurrió en Brasil, con la matanza que se produjo en Canudos en nombre de las luces de la razón?
Estimado Jaime del Castillo;
1. Me aúno en tu afán por darle apoyo moral a un catedrático impecable que está siendo víctima de una campaña nauseabunda para destruir su personalidad. Es una pérdida inútil de tiempo, pues el mundo académico no se maneja con criterios comerciale, como Faverón & Co. parecen creer.
2. Discrepo en cambio con el tema de la tradición. La modernidad nos arrebató una identidad multiétnica a la vez que mestiza, para arrojarnos en el proyecto revolucionario de "las luces", esas luces que nos hicieron pasar de ser uno de los países más ricos y respetables del planeta a lo que somos ahra, una continuación de Bolivia.
Un abrazo.
Hola Víctor:
Que alegría me dá tu comentario, porque precisamente a ese punto quería llegar desde hace tiempo que los vengo leyendo con toda paciencia. Si te das cuenta en mi comentario inmediatamente anterior estoy de acuerdo totalmente contigo en los conceptos sobre MODERNIDAD, es más, el mismo Gonzalo Gamio también está de acuerdo con lo último que has expresado sobre la multiculturalidad o pluriculturalidad muy nuestra, lo que nos proyecta hacia una concepción filosófica muy peculiar, la nuestra, la peruana. Si analizamos las cosas en frío, podríamos llegar a generar una propuesta filosófica peruana muy interesante, sobre todo porque existen muy buenos cuadros, que los veo discutiendo pero con otras coordenadas y latitudes. Lo dejo ahí.
Dr. Hernando
Somos muchos los que no podremos asistir al evento de la Universidad
San Pablo de Arequipa.
Es que Usted podria publicar en su blog noticias sobre los puntos mas relevantes del evento?
Gracias
P.D. Va Usted a publcar su ponencia en su blog?
E.
El último post de Faverón ha de ser el más absurdo desde que comenzó con esta campaña histérica de denunciar a la gente que no piensa como él. Dado que lo mandaron a leer a Nicholas Goodrick-Clarke para documentarse – y que al parecer consultar un libro de divulgación es más fácil que ir a las fuentes (Schmitt, Evola, etc) – Faverón corrió a la biblioteca de su pequeña universidad y tomó el último libro de Goodrick-Clarke, titulado “Black Sun”. El problema es que cuando el profesor Hernando mencionó al autor inglés, se refería a su libro “The Occult Roots of Nazism”, que trata sobre las sociedades ocultistas y movimientos volkish que precedieron al nacionalsocialismo en Alemania.
“Black Sun”, como han hecho notar conocedores del tema, es una mera regurgitación de informes sobre el “peligro nazi” y el antisemitismo redactados por dos organizaciones ampliamente denunciadas – tanto por progresistas como conservadores – por profitar con el tema y su inescrupuloso manejo de la información: la Anti-Defamation League (acusada, entre otras cosas, de robar información de agencias gubernamentales) y el Southern Poverty Law Center, entidad cuya credibilidad y falta de rigor investigativo ha sido expuesto en reiteradas oportunidades, así como sus turbios manejos financieros. Junto con las informaciones proporcionadas por estas dos agencias, Goodrick-Clarke también tomó información de dos libros de sensacionalismo de los periodistas Martin Lee y Kevin Coogan, los que se sitúan un peldaño más arriba del canal de televisión Infinito y tal vez dos peldaños más arriba del blog del propio Faverón. A modo de anécdota, Black Sun es un libro tan débil, mal armado y montado a la rápida para capitalizar un intyerés pasajero del público hace unos años, que hasta la ilustración de portada fue robada sin permiso (y costó a la editorial una indemnización monetaria al artista afectado).
Para alguien que no cuenta ni con la formación ni la inclinación para aprender sobre áreas fuera de su competencia, cualquier cosa que diga Goodrick-Clarke no va a merecer reparos. En vista de la grave ignorancia de Faverón, quien en estos últimos días ha sido sorprendido traduciendo información falsa de Wikipedia y atribuyéndosela como propia, es difícil que esté capacitado para discernir la veracidad de lo que lee. Es por eso que presenta como verdad que Mussolini elevó a categoría de ley la doctrina racial de Evola, hecho que cualquiera que conozca la historia del fascismo sabe que es abiertamente falso. De la misma forma, regurgita las acusaciones de cómo Evola supuestamente inspiró a todos los terroristas de derecha en la Italia de las últimas décadas. Para alguien que en su extraordinaria falta de conocimientos jamás ha oído hablar de la Operación Gladio, la estrategia de tensión y los “años de plomo”, le resultará completamente increíble saber que gran parte de ese supuesto “terrorismo de derecha” fue financiado por la CIA como parte de su ofensiva contra el eurocomunismo durante la guerra fría (partiendo por el que tal vez sea el atentado más conocido, las bombas en la estación de trenes de Bolonia en 1980). Naturalmente, todo esto ha sido ampliamente documentado, pero para alguien con las carencias formativas del profesor asistente de literatura de Maine, se trata de nombres y datos sobre los que jamás oyó hablar.
Difícilmente los supuestos terroristas de derecha italianos iban a necesitar los libros de Evola para tomar las armas y combatir el igualmente violento accionar de la izquierda radical de ese país. Es efectivo que algunos grupos sí poseían una formación fascista y algunos sí estaban familiarizados, aunque sea superficialmente, con Evola. El problema es que en la forma que Faverón presenta los hechos – evidentemente tras una ojeada a una fuente de tercera mano como Black Sun – da a entender que el terrorismo ha sido constante y sistemático.
(más a continuación)
Respecto de la caracterización de las ideas de Evola – un ignorante (Faverón) parafraseando el análisis de un sensacionalista (Goodrick-Clarke) – es poco lo que se puede agregar y menos lo que van a entender quienes no han leído al autor en cuestión. Basta notar la contradicción más obvia, en que Faverón destaca cómo los nazis tenían marcadas desavenencias con el autor italiano, dato que refuta la denuncia más histérica hecha por él mismo hace unos días. A saber, que Evola es la inspiración perpetua del nazismo, comentario que de por sí revela ignorancia.
No obstante, si el problema de Faverón fuese uno de simple ignorancia, se podría explicar por la evidente petulancia con que administra su blog, donde todo contradictor es insultado y denunciado (un ejemplo notorio fueron los ataques a Gonzalo Gamio cuando osó expresar una opinión sobre el conflicto palestino-israelí que él no compartía). De ser así, apenas estaríamos frente a un personaje que no tiene nada más que hacer que legitimarse a través de su blog, montando ciber-peleas en donde es árbitro y censor, libre de responder a cuestionamientos legítimos a su falta de argumentos o sus abiertas mentiras (p. ej: las anécdotas sobre la vida de Evola que citó hace un tiempo) y en donde de vez en cuando es auxiliado por conocidos que exhiben esa misma atención selectiva así como anónimos que hacen de porristas. Esta actitud se podría calificar de malicia, pero dada la esterilidad de montar una campaña de desprestigio a través de un blog, me parece más acertado caracterizarlo como infantilismo y un grado de obsesión levemente desconcertante. Después de todo, dedicarle casi dos semanas de ataques a una persona que lee libros que Faverón no aprueba habla más de sus propias carencias, partiendo por el triste espectáculo de ver a un profesor con exceso de tiempo para intercambiar insultos y carencia de medios para realizar algo productivo.
Para Jaime y VS: La tradicion al ser metapolitica puede manifestarse en distintos tiempos y espacios, no interesa si estamos hablando de Peru o Alemania.
Anonimo: La ponencia de la U San Pablo se publicara junto con las demas a fin de año asi que mientras tanto no puedo colgarla en la red, hare para el blog un resumen de los ponencias mas interesantes
GB: Si pues este texto no tiene nada que ver con el primero que fue su tesis doctoral, bueno si esta como director de un programa en la Universidad de Exeter no podria ser muy "amistoso" con las ideas de Evola. Mejor Faveron deberia leer "Arctus" de Jocelyn Goodwin ,a ver que entiende!!! pero ya sabemos que el no persigue otra cosa que destruir!
saludos
eduardo
Eduardo:
No conozco a Goodrick-Clarke pero sí a gente que ha tratado con él en numerosas oportunidades y las referencias que tengo (y que confirman tanto Black Sun como la pésima biografía de Savitri Devi) es que es un académico con escasos conocimientos del tradicionalismo o el fascismo de posguerra.
Otra de las cosas que me ha llamado la atención de los comentarios suscitados a raíz de los ataques de Faverón es esa crítica a quienes le hemos recomendado que lea sobre el tema antes de opinar. No veo qué tiene de malo pedirle que argumente con conocimiento de causa, en especial porque ya ha sido sorprendido en prácticas derechamente cuestionables, como atribuirse como propio un argumento infundado sobre Carl Schmitt que tradujo de Wikipedia (poco después dijo haber “estudiado” con atención al jurista alemán), inventar anécdotas de la vida de Julius Evola que jamás ocurrieron, atribuir a Schmitt una cita en que parafraseaba otro texto, así como las generalizaciones evidentemente exageradas, los insultos y los comportamientos más burdos como mostrar una foto de Mishima con el brazo alzado como “prueba” de su fascismo. Referirse a “los metapolíticos” como si existiera un movimiento intelectual o político que se autodenomina así o como si dicha etiqueta fuese una categoría válida para definir lo que pretende atacar revela su escaso conocimiento de la metapolítica (el segundo capítulo de la obra de O’Meara, New Culture, New Right, tal vez sea la explicación más sucinta y a la vez acertada que he leído sobre qué es la metapolítica).
Pedirle que lea a los autores antes de criticarlos (así como atacar a la gente que sí los ha leído y por ende hecho el esfuerzo que él no está dispuesto a hacer) no es un truco retórico o una muestra de esnobismo. Es sencillamente intentar discutir racionalmente (y pese a que ha quedado claro que es inútil) con alguien que ha optado por los ataques infantiles.
Gracias Dr. Hernando
Estaremos esperando su reseña e impresiones del evento de la San Pablo.
Y ya aburre la polemica con Faveron, a ver su Ud. tambien sintoniza deja esa polemica esteril y regresa a la Filosofia del Derecho que es por lo que sus alumnos lo hemos apreciado siempre.
E.
Anonimo:
Gracias Dr. Hernando
Estaremos esperando su reseña e impresiones del evento de la San Pablo.
Y ya aburre la polemica con Faveron, a ver su Ud. tambien sintoniza deja esa polemica esteril y regresa a la Filosofia del Derecho que es por lo que sus alumnos lo hemos apreciado siempre
Gracias anonimo, de hecho yo estoy tambien agotado y no te preocupes que sigo en la filosofia del derecho
saludos
eduardo
Al parecer, Gustavo Faverón continúa escribiendo en su blog pese a que hace días que es incapaz de decir algo nuevo. Es como si descubriera dos o tres datos más por Internet y sintiera la necesidad de dar cuenta de ello en su blog. Su más reciente hallazgo es Roger Griffin y su teoría del fascismo palingenético. Lo curioso es que si efectivamente lo conociera de antes (pese a que se le recomendó leerlo), hoy no tendría problemas para distinguir entre la revolución conservadora, el nazismo, el fascismo y el nacional bolchevismo. En el pasado, he intercambiado correspondencia con el profesor Griffin. Tal vez le cuente de este nuevo divulgador de su obra en la blogósfera.
Una cosa que no cambia con Faverón es su metodología de listados, donde elabora una suerte de index de los intelectuales que está prohibido leer y luego enumera las características o etiquetas que le parecen reprochables en cada uno de los nombres malditos. Me resulta asombroso que un profesor universitario sea incapaz de discutir las ideas de estas personas y opte por este método, una suerte de lista de supermercados que solamente podrá impresionar, aunque parezca majadero repetirlo, a quienes no han leído a los autores en cuestión.
Los “nazis” de Faverón ahora son: Jünger, quien estuvo involucrado en el atentado de Stauffenberg para asesinar a Hitler y fue crítico del nacionalsocialismo desde siempre, incluso negándose a aceptar una candidatura parlamentaria por parte del NSDAP cuando aún no era gobierno; Sombart, a quien le censuraron sus libros durante el régimen nazi y su obra sobre los judíos y el capitalismo –una interpretación en el marco del trabajo de Weber – no sólo no es antisemita sino que fue acusada como “pro judía” (sea lo que sea eso, pero dado que el señor Faverón todo lo entiende en términos de pro y contra, sin matices, creo que basta para refutar sus aseveraciones previas); y Niekisch, que nunca fue pro nazi (aunque Faverón diga lo contrario) y cuyas actividades en contra del régimen hitleriano le valieron la cárcel. Este último tal vez sea el ejemplo más ilustrativo de las acusaciones al vuelo de Faverón. La memoria de una persona que efectivamente combatió un régimen y pagó con su propia libertad es hoy atacada por un anti nazi que vive y muere a través de un blog.
Los otros dos nombres que cita son aún más difíciles de explicar: Moeller van der Bruck, que murió en 1925 y cuyo único pecado fue acuñar el concepto Tercer Reich, pese a que si se lee su libro su visión de un Reich tiene muy poco que ver con lo que llevó a cabo Hitler; y Spengler, a quien Faverón describe como “místico germánico” (¿no se habrá confundido con la entrada de Wikipedia del Meister Eckhart?) sin reparar en que fue crítico del nazismo y en especial de sus ideas raciales.
Alguna vez disfruté leyendo ciertos comentarios literarios de Faverón. Hoy me resulta francamente triste ver cómo a través de este empecinamiento infantil y odiosidades propias de un patio de colegio, un profesor se auto desprestigia de esta forma.
Ante la falta de argumentos de Faverón solo queda la táctica del agotamiento del rival.
En fin, Faverón se ha convertido en el mayor exponente del argumento ad nauseam.
Debería postular para presidente regional o algo así
Ad nauseam o reductio ad hitlerum... es fascista, luego es digno de no ser estudiado ni tomado en cuenta.
El blog del tal Gustavo Faverón es un atado de lugares comunes académicos.
Rodrigo N.
Hola Eduardo:
Acabo de leer tu mensaje que me dirijes en los siguientes términos: "La tradicion al ser metapolitica puede manifestarse en distintos tiempos y espacios, no interesa si estamos hablando de Peru o Alemania." Estoy perfectamente de acuerdo de ello, sólo que creo que nosotros también podríamos generar pensamiento metapolítico desde nuestra coordenada. Me resisto a creer que los únicos inteligentes y sabios e iluminados sean los pensadores EUROPEOS o los EE.UU. Lo dejo ahí.
La tradiciòn es un lastre.
La tradiciòn es un lastre.
Estimado Eduardo:
Los perros siguen ladrando. Todo está yendo muy bien.
Eres uno de los mejores académicos que tenemos en nuestro país. Tus artículos son leídos en muchas ciudades. No te preocupes ni te gastes por un académico de medio pelo como Faverón. Al pobre lo comentan puros anónimos huelepedos. Su séquito es de lo más asqueroso en el pensar. Tú eres una gran persona. Los malvados siempre desean destruir a los sabios, perfectos, santos y buenos. Miremos a los santos, mártires y a nuestro mismo Señor Jesucristo.
Saludos,
Ricardo.
Profesor Nieto:
Me parece interesante el post y muy esclarecedor. Pero quisiera comentar algo sobre Guenon, ya que paseando de vez en cuando por los libreros viejos siempre se ecnuentran "reliquias", en una de esas me topé con un libro de Guenon("La crisis del mundo moderno") y ya que Guenon es muy mencionado me lo compré. No comulgo con muchas de sus ideas, pero para poder criticar es necesario leer antes lo que se va a criticar. Bueno a lo que hiba, una frase me ha llamado la atencion (del primer capitulo, pues aun estoy leyendolo, solo cuando me da tiempo los cursos jeje) "el espitiru especificamente moderno es el espiritu antitradicional", creo que Guenon se mueve en el antagonismo conceptual, y hasta cierto punto dialecticamente (en sentido de Marx y Hegel), de las oposiciones fundamentales, por ejemplo la lucha de contrarios, pero los anatgonismos van mas allá. No sólo es la oposcion negro blanco, o arriba y abajo, tomados de manera absoluta, al igual modernidad como diferente a la tradicion. Si lo tomamos de manera antagonica no hay ninguna reconciliacion entre ambas, creo que se obvia los matices, por ejemplo entre el negro y blanco, hay infinidad de colores, y entre arriba y abajo hay de intermedio varias gradas, de igual manera entre moderno y tradicion hay un proceso, en el cual uno no anula al otro, sino mas bien se complementan. Varios sociologos al tratar de describir el problema del Perú lo tipifican como un "país en proceso de modernisacion". No creo que la modernidad destruya totalmente la tradicion, entre ambos puede suceder una simbiosis rica culturalmente hablando. Tanto la modernidad y la tradicion pueden formar algo nuevo e interesente.
Atte.
Hola uriel, ciertamente no se trata de las oposiciones en el sentido moderno de hegel, sino son dos perspectivas que trabajan en distintos niveles, por eso no puede haber aqui una modernidad tradicionalista sino que o bien aceptas que la autoridad viene de lo alto o el poder es fruto de la voluntad personal, puedes entender las diferencias entonces a traves de la distincion entre AUTORIDAD Y PODER!!
saludos
eduardo
Publicar un comentario